Holy Moley es un concepto de minigolf que lleva la experiencia tradicional a una nueva perspectiva. Es mucho más que un juego; es un espacio donde el diseño vibrante y las formas creativas transforman cada partida en un recorrido visual único. Con una estética llena de colores llamativos y formas geométricas, Holy Moley rompe con el esquema típico de los campos de minigolf, apostando por una atmósfera que invita a jugar y a disfrutar de un ambiente social y dinámico.
Nuestro objetivo era transmitir esa diversión social y cercanía en la identidad de marca, conectar con un público juvenil y familiar y convertirse en el minigolf que todos quieren jugar.
Personalidad: Diversión. Social. Familiar. Colorido.
Entregables: Diseño de logotipo, tipografía y paleta de colores corporativa, diseño de flyer y mapa, cartelería y merchandising.
